La Asociación de Comercializadores de Carne "15 de Abril" de Tarija se unió este lunes al paro nacional indefinido convocado por la Confederación de Trabajadores de Carne de Bolivia (Contracabol). Los comerciantes han suspendido la venta de carne en la región, exigiendo al Gobierno Nacional que regule el precio del producto en todo el país y priorice el abastecimiento interno antes de autorizar la exportación.

Karina Nieves, representante de la asociación tarijeña, explicó que la exportación debería permitirse solo en caso de un excedente de carne, para garantizar precios justos en el mercado interno. "El bajo abastecimiento incrementa los precios y afecta directamente al bolsillo de la población", afirmó. 

Los carniceros denuncian un aumento en el precio del kilo gancho que adquieren de los ganaderos, que subió de 24 a 33 bolivianos en las últimas semanas. Este incremento, según Nieves, está impactando tanto a los comerciantes como a los consumidores finales.