El Ejército israelí indicó que unos 140 cohetes fueron lanzados este viernes hacia Israel desde el Líbano, donde el movimiento islamista Hezbolá intercambia disparos casi diarios con esta fuerza, en apoyo a su aliado palestino Hamás en la guerra en Gaza.
Cohetes de Hezbolá y bombardeos de Israel
"Unos 140 cohetes fueron disparados desde Líbano en una hora a partir de las 13H02 (10H2 GMT)", declaró a la AFP una portavoz militar israelí.
El fuego se produjo después de que el Ejército israelí afirmara haber alcanzado durante la noche decenas de lanzacohetes que estaban listos para ser utilizados contra Israel por Hezbolá, considerada como organización terrorista por la Unión Europea, Estados Unidos y Argentina, entre otros países occidentales.
Israel lanzó cientos de bombardeos contra posiciones del movimiento islamista Hezbolá en Líbano, horas después de que el líder de esta milicia proiraní prometiera "duras represalias" tras la ola de explosiones de dispositivos de comunicación que dejó 37 muertos y miles de heridos.
Hezbolá responsabiliza a Israel por el estallido de dispositivos de comunicación de miembros de la formación chiita el martes y el miércoles en varias regiones de Líbano, y el jefe del movimiento, Hasan Nasralá, prometió el jueves que el Estado hebreo recibirá "un justo castigo".
ONU pide moderación, Líbano acusa "crimen de guerra"
La ONU, Estados Unidos y varias potencias hicieron un llamado a la moderación ante el temor de una escalada en Oriente Medio, cuando se acerca el primer aniversario del estallido de la guerra entre Israel y el movimiento islamista palestino Hamás en la Franja de Gaza.
El ministro de Exteriores de Líbano, Abdalá Bu Habib, señaló que Líbano presentará una queja ante el Consejo de Seguridad de la ONU para denunciar "la agresión ciberterrorista de Israel", que calificó como un "crimen de guerra".
El primer ministro libanés, Nayib Mikati, instó a la ONU a adoptar "una postura firme para detener la agresión israelí contra Líbano y la guerra tecnológica que está librando" en una reunión del Consejo de Seguridad prevista este viernes.
El estallido de bíperes y walkie-talkies mató a 37 personas e hirió a unas 3.000 en bastiones de Hezbolá. Israel no ha comentado el ataque, que se produjo después de que el ministro israelí de Defensa, Yoav Gallant, declaró el miércoles que el "centro de gravedad" de la guerra, lanzada inicialmente contra el movimiento palestino Hamás en Gaza, se está desplazando "hacia el norte", a la frontera con Líbano.
Hezbolá habla de "una declaración de guerra"
Durante el esperado discurso televisado de Nasralá el jueves, el primero desde la ola de explosiones, aviones israelíes sobrevolaron Beirut rompiendo la barrera del sonido. Nasralá acusó a Israel de haber cruzado "todas las líneas rojas" y denunció una "masacre" que podría considerarse como "una declaración de guerra".
El estallido casi simultáneo de bíperes el martes se produjo horas después de que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, afirmó que el retorno de las miles de personas desplazadas en el norte del país a causa del conflicto era una de las prioridades de su Gobierno. Un objetivo que Nasralá aseguró que nunca se cumplirá.
"Ninguna escalada militar, ningún asesinato o ninguna guerra total conseguirán el regreso de los residentes [del norte de Israel] a la frontera" con Líbano, proclamó. El combate de Hezbolá contra Israel "no terminará hasta el fin de la agresión en Gaza", a pesar de "toda esta sangre derramada", añadió.
La Agencia Nacional de Noticias (ANI) libanesa reportó 57 bombardeos de la aviación israelí en el sur de Líbano. Hezbolá reivindicó el jueves al menos 17 ataques contra 14 objetivos militares en el norte de Israel.
El Ejército israelí y Hezbolá -aliado de Hamás- intercambian disparos casi diarios en la frontera desde el inicio del conflicto en Gaza hace más de once meses, pero estos son los bombardeos más intensos desde que comenzaron los enfrentamientos.