La Unidad de Bomberos de la Policía Boliviana halló varios explosivos escondidos cerca del puente de la localidad de Parotani, en Cochabamba.
A través de sus redes sociales, la institución del orden expuso las fotografías del hallazgo y se puede observar los explosivos camuflados en llantas y entre las piedras.
Precisamente, ese sector fue el escenario del enfrentamiento entre efectivos policiales y bloqueadores evistas el pasado el 25 de octubre de este año. Entonces, la protesta liderada por el denominado Estado Mayor del Pueblo, cuya dirigencia respalda a Evo Morales, cumplía su decimosegunda jornada.
Policía Boliviana
Ese día, el primero de otros enfrentamientos, bloqueadores lanzaron piedras, bombas molotov y dinamita contra los policías que buscaban despejar el punto de bloqueo de ese sector.
Según informó la Policía, se hallaron, incluso, trampas cazabobos y cables detonantes de dinamita.
Una segunda jornada violenta entre la Policía y los bloqueadores se vivió el 1 de noviembre. Esta vez, el operativo policial-militar despejó la ruta que conecta a Cochabamba con el occidente del país. Un contingente policial-militar llegó a ese sector, donde los esperaba un grupo de bloqueadores de al menos 5.000 personas. Hubo policías heridos y varios aprehendidos.
Explosivos
Este martes, el ministro de Defensa, Edmundo Novillo, informó que un soldado que patrullaba en Parotani quedó herido en su mano izquierda. Según informó a través de sus redes sociales, se trata de una acción “deliberada” y que dejaron un “campo minado”.
“Denunciamos y alertamos que sorpresiva y, lamentablemente, la mañana de hoy (lunes) un soldado del Ejército, realizando el patrullaje, resultó víctima de una explosión que impactó en la mano, generando daño severo en uno de los dedos”, publicó Novillo.
El 6 de noviembre, las organizaciones evistas declararon una “pausa humanitaria” en los bloqueos que perjudicaron durante 24 días al país y aislaron a Cochabamba del resto de departamentos.
Bloqueo evista
Pero no solo eso, hubo un daño económico que superó los $us 2.200 millones y afectó a varios sectores, principalmente productivos.
Pese al cese de la protesta, aún permanecen efectivos de la Policía Boliviana y de las Fuerzas Armadas en la ruta al occidente del país.